jueves, 25 de julio de 2013

El estigma de Abraxas

Bebí la sangre de mi enemiga
Calentó presta mi pecho
robé su aliento al besar su boca
consumí su cuerpo sin despecho

¡Oh, cómo olvidar sus besos!
amargos de limón y sal
Crudo en garganta el fuego
De en sus brazos acabar

Su cuerpo intangible escapa
de entre mis labios y mi ser
el llanto de los ojos casi aflora
Mas insistente causa placer

Grito del salvaje humano encerrado
prejuzgada en juicio y altar
cárcel del débil, musa del abstracto
generas amor sin saber amar

 Finos labios de color carmesí
que al besar se tornan negros
¿Cuánto estás dispuesto a dar?
de ellos siempre obtendrás menos

Has de hincar tu aguijón
en mi cuerpo cual aguja
liberando lento tu veneno
la mente tornando difusa

En mis ojos ya no veo 
un vestigio de quien fui
antes inocencia, agua pura
ahora río turbulento y ruin

Quizás no me he degenerado
O rebajado un poco mi nivel
He caminado el sendero oscuro
ahora a tientas puedo ver

Quien ha llegado al Cielo
el Mal lo hará ceder
yo he conquistado ambos
harta sabiduría y poder

Oda a una Ménade

Embriaga tu alma de donesÚsalos hasta el fin de los días
Grata tu llegada a mis brazos
Esos recuerdos de toda la vida
Nubes en el cielo despejamos
Invencibles cual tren en vías
Ardid del joven, pasión latía

Revientan al viento las vides
En vino se bañan las copas
Baco y su lira aparecen
Evoca su voz tu belleza
Cantan los mortales y dioses
Cantan las Musas a tu nombre
Amada mía, en esta fiesta


Entibia la sangre tu partida
Soledad como Orfeo sentía
Qué decide a tus ojos el destino
Unidos, locos o divididos
Iría al Fin del mundo de rodillas
Valiente, cual fiera hambrienta
Esperando tu llegada brusca
La boca que provee ambrosía